LA PROLIFERACIÓN DE LOS CONTACTOS CASUALES, EL CONSUMO DE DROGAS Y EL ABANDONO PROGRESIVO DEL CONDÓN, QUE SOLO USAN EL 25 POR CIENTO DE LOS JÓVENES, DISPARAN LOS CONTAGIOS.
El último informe elaborado por el Centro Nacional de Epidemiología revele una tendencia al alza desde 2000 en infecciones como la gonorrea y la sífilis se ha mantenido en 15.338 y 6.613 casos diagnosticados, respectivamente, lo que ha supuesto un incremento del 19,16 por ciento desde 2010 en el caso de la gonorrea y del 8,5 desde 2014 en el caso de la sífilis. Las cifras de clamidia son de un incremento del 18 por ciento desde 2016 hasta alcanzar las 20507 infecciones notificadas.
Irene Fuentes de la Vega es coordinadora del grupo especial de ITS de la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV). Dice que la mayoría de los infectados son adultos jóvenes - entre 25 y 34 años-, con algunas diferencias según la enfermedad. En el caso de menores de 25 años el porcentaje de positivos en linfogranuloma venéreo (LGV) y mínimo en el caso de sífilis.
"La gente joven tiene poca perspectiva de riesgo de contraer una ITS. Además, creen que estas infecciones, incluido el SIDA, tiene solución, por lo que se arriesgan más", apunta el sexólogo Santiago Frago,codirector del Instituto Amaltea de Sexología.
"En la actualidad, las relaciones eróticos sexuales son menos oficiales. En 2003 preguntabas en las aulas por qué una pareja querría tener un encuentro sexual y la primera era por amos, la segunda era para tener hijos, y alguno se arriesgaba y decía que por placer, y todos se reían. Si lo preguntas ahora sólo se acuerdan del placer",indica el especialista.
"ITS y hábitos tóxicos van de la mano", advierte la doctora Mar Vera, miembro de la Sociedad Española de Enfermedades infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC). "Hay muchos consumos de sustancias estimulantes que forman parte de la rutina del ocio nocturno y a menudo el consumo de estas sustancias altera la percepción de riesgo, no se es consciente de lo que estás haciendo y te dejas llevar".
Tampoco Ayuda que los jóvenes tomen como referencia las películas pornográficas, en las que nadie usa preservativos y los encuentros sexuales son con personas a las que hace escasos minutos no se conocía de nada. "Las series de televisión que se ven habitualmente, que no son porno, es cierto, pero muestran detalles que hacen que la gente joven sea más proclive al riesgo. Encuentros sexuales en cualquier momento, lencería erótica hasta en el trabajo, juguetes eróticos y camas confortables siempre disponibles, el preservativo, por supuesto, no existe....", indica el sexólogo Santiago Frago.
La otra cara de la moneda la ofrecen los resultados contra el VIH, porque las cifras de incidencia se han reducido gracias a mejores retrovirales, de fácil acceso, a medicamentos que reducen las posibilidades de contraer el virus a través de las relaciones sexuales o el consumo de drogas inyectables como la heroína. En 2021 se notificaron solamente 340 casos de SIDA. El 80,9 de los infectados eran hombres, y la edad media, en ambos sexos, era de 44 años. Desde el inicio de la epidemia, a mediados de los 1980 se han certificado 89.345 casos en territorio español. Tras llegar a un importante pico a mediados de los 1990, el número de infectados ha experimentado un declive.
Es cierto que el porno (como siempre) ha afectado mucho a la hora de no tomar precauciones. Los datos me han sorprendido mucho teniendo en cuenta que a día de hoy estamos al alcance de toda la información sobre las enfermedades.
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