El 29 de febrero de 1863, cientos de nativos americanos de la trino shosone murieron asesinados por las tropas voluntarias del coronal Patrick Connor en Río Oso (Utah), en medio de una incursión de castigo por los repetidos ataques a los colonos que se habían instalado en la región. Murieron entre 350 y 500 soshones, incluyendo hombres, mujeres y niños. El Río Oso está en el Valle de Cache, en la confluencia de los recién creados estados de Idaho y Utah.
En 1863 los periódicos hablaban de las batallas de la Guerra de Secesión en el Este, por lo que las noticias de esta matanza y la posterior matanza de Sand Creek (1864), pasaron desapercibidas.
El Destino Manifiesto del presidente Polk (1847)- la noción de que Estados Unidos es el país elegido por Dios, con la misión de expandirse desde el Atlántico hasta el Pacífico- Calaron en los recién llegados al país, fugitivos de las hambrunas, perdedores de la Revolución industrial y de las sucesivas revoluciones sociales fracasadas de Europa. Es muy parecida a la idea del "Espacio vital" que los nazis emplearon para justificar la ocupación de otros países y de sus recursos durante el siglo XX.
Tras años de escaramuzas a lo largo de la llamada Ruta de Oregón entre nativos americanos y colonos armados, el ejército de los Estados Unidos se decidió a intervenir en el Valle de Cache llamados Valle de los Sauces por los nativos). Era un coto de caza tradicional para los shosones del Noroeste. Allí recolectaban semillas, pescaban y cazaban bisontes, ciervos y alces.
En 1847, el líder de los mormones de Utah, Brigham Young se reunió con los líderes soshones para discutir el reparto y cesión de tierra en el norte del territorio. Se hablaba de coexistencia pacífica entre los mormones y los nativos americanos, pero cuando el hombre blanco empezó a esquilmar la caza y los recursos tan valiosos para las subsistencia de las comunidades nativas, lo que fue empujando a los indios hacia zonas más empobrecidas en recursos.
Los shosones empezaron a atacar a los granjeros y a los mineros del oro durante la segunda mitad de 1862. El jefe Cazador de Osos y el coronel Connor se enfrentaron en un campamento en la orilla occidental de Beaver Creek y el Río Oso al amanecer. Las dificultades de atacar durante el invierno de 1863 a causa de la nieve y de la mala equipación de los soldados de la Caballería les impidió hacer un ataque frontal, por lo que los soshones tuvieron tiempo de organizar una resistencia en la que murieron 14 soldados y 49 resultaron heridos. Los Shosones perdieron 300 guerreros y 175 caballos de guerra. Se destruyeron, tipis, cabañas, cercados de caballos así como todas las reservas de trigo almacenado para el invierno. En su autobiografía, el inmigrante danés Hans Jasperson dice que contabilizó 493 cuerpos. Hubo pocos supervivientes.
Los shosones que decidieron adoptar la forma de vida del hombre blanco construyeron granjas bajo la autoridad de la Iglesia Mormona. Los que prefirieron no hacerlo viven actualmente en las reservas de Fort Hall (Idaho) y Wind River (Wyoming).
El sitio histórico de la matanza de Río Oso se ubica cerca de la Ruta 9 y fue declarado Monumento Nacional en 1990.
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