Tras la pista de los fugitivos.

 (Adaptación de un artículo de Fernando Goitia en XL Semanal).

España es el destino predilecto de los prófigos. Pero lejos de ser un santiario, aquí se los detiene más que en otro país europeo. Caen enmanos de las autoridades unos 1000 cada año. Así trabajan los agentes especializados en darles caza.

El teléfono suena en el despacho del inspector jefe del Grupo de Fugitivos de la Policía Nacional. Se llama Fernando González. Los franceses han localizado en España el paradero de François de Pasquali, uno de los fugitivos más buscados por la Europol. Pasquali violó a una anciana de 84 años con alzheimer en Francia.

Los agentes analizan las fotografías difitales y los vídeos que Pasquali se ha tomado, junto a una mujer, en un balcón. "El balcón pertenece a un bloque de edificios en Castelldefels", concluyen. Lo siguiente que sucede es una llamada a Barcelona, una rápida y discreta movilización policial y una corta espera hasta que Pasquali sale a la calle.

A los fugitivos hay que detenerlos en la calle. "No podemos ir a buscarlos a sus domicilios- explica González- ni registrarles la casa. La orden de detención procede de un magistrado extranjero, lo cual nos limita mucho. No podemos pinchar teléfonos, salvo que tengamos pruebas de que el prófugo va a delinquir o facilitar la comisión de delitos en nuestro país".

Para seguir estando a salvo tanto tiempo como sea necesario el prófugo no puede abrir cuentas bancarias, usar tarjetas de crédito o usar el teléfono móvil. No puede compras bienes o abrirse un perfil en las redes sociales. El paso del tiempo les hace creer que a lo mejor les han olvidado en sus países y pueden ceder un poco, pero tomárse en serio esta idea es como decir que se han cansado de vivir en libertad. "Recuerdo a un ecuatoriano buscado por homicidio en su país que se dio de alta en la Seguridad Social española con su nombre, y se puso a trabajar en un bar", recuerda González.

Lo primero que debe hacer un fugitivo es conseguir una documentación falsa. "En algunos países del Este de Europa, Albania o Turquía, la corrupción de los administradores permite hacerse conesos papeles falsos. En Georgia es posible cambiarte los apellidos legalmente y obtener una nueva documentación con esta nueva identidad. También vemos a muchos serbios con documento legal de Cracia o de Montenegro..", explica una funcionaria policial.

El Grupo Huídos de la Justicia de la Guardia Civil dice que la mayoría de los fugitivos son detenidos por cometer nuevos delitos en España, por alarmas que saltan al identificar los aduaneros a personas en los aeropuertos, patruolas de la Dirección General de Tráfico que para a algunos en controles al azar, o por casualidad. "Un Policía capta algo muy sutil en alguien y el profugo acaba desenmascarado y deportado", explica González.

¿Por qué los criminales eligen España para esconderse? Hace buen tiempo, la comida está deliciosa y hay colonias de extranjeros en la costa de Andalucía y Baleares entre las que pasar desapercibido. También les atrae la posibilidad de hacer negocios turbios en zonas con gran presencia del crimen organizado. Emilio Lozoya, ex director de la petrolera estatal mexicana, se escondió en La Zagaleta, complejo residencial para multimillonarios con su propio servicio de seguridad. "Cuanto más dinero tienes, menos te expones y más difícil nos resulta detenerte", dice Fernando González.

Lozoya era prófugo desde 2009 por corrupción, lavado de dinero y crimen organizado. Fue detenido en 2020 tras dos meses de paciencia, precaución y altísima vigilancia, la trinidad del cazador de fugitivos.