Fue un pionero en materia de aviación, realizó el primer vuelo transatlántico sin escalas en 1927. Charles Lindbergh consiguió una gran poluparidad no sólo por su éxito profesional; su vida estuvo marcada por sus inclinaciones nazis y el secuestro de su hijo.
Luces:
7:52 de la mañana del 20 de mayo de 1927. Charles Lindbergh, un piloto de aviación postal, despega en el Rooselvelt Field de Nueva York en el monoplano Spirit of St. Louis. 6.500 kilómetros y 33 horas después aterriza en el aeródromo parisino de Le Bourget. Su única compañía habían sido los sonidos del motor y una molesta mosca que se embarcó en Nueva York. Tras ese primer vuelo, el coronel Lindbergh realizó mucho otros entre América y Europa. En mayo de 1933 hizo un vuelo sin escalas que le trasladó desde Nueva York hasta un aeródromo de Glenlale (California)- Lo acompañaba su esposa.
Sombras:
Philip Roth publicó en 2003 la ucronía THE PLOT AGAINST AMÉRICA. Los estadounidenses nombraban en esta novela de Historia alternativa a Lindbergh presidente de los Estados Unidos en 1940. Lo primero que hace el pionero de la aviación es dar mítines antisemitas por todo el país. Salvo lo de ser presidente todo lo que se le ve hacer a Lindbergh en la novela de Roth es real. Estaba fascinado por el Tercer Reich, visitó Alemania varias veces durante los años 30, aceptó homenajes de importantes personalidades nazis y dio mítines antisemitas y contra la entrada de los Estados Unidos en la Segunda Guerra Mundial
Este "lado oscuro" ha levado a su hijo superviviente Charles Lindbergh Jr a asegurar que su padre lo había apartado de la familia porque le costaba hablar de niño y tenía un pie desviado cuando solo era un bebé.
El secuestro y muerte violenta de otro de sus hijos cuando solo era un bebé en 1932 le llevaron a buscar venganza sobre todo a partir del momento en que el FBI capturó a un sospechoso judío llamado Bruno Hauptmann. La obtuvo pero quizá a cista de la vida de un inocente.
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