Dos novias hablan de hacer un trío con una tercera mujer, y una amiga se ofrece a ser esa persona. Se citan esa misma noche, Se besan, se acarician, tres torsos,seis brazos, pero en ningún momento se ven tres vaginas ni nada que muestre sexo explícito. Esta escena de la serie SMILEY se rodó con la ayuda de una coordinadora de intimidad, una profesional que se asegure de que nada de lo uqe se muestre pase al terreno de lo real y embarazoso o, peor aún traumatizante
"Apenas hubo testigos" declara Meritxell Calvo, actriz de SMILEY. "Se pacta todo lo que se va a hacer delante de la cámara. Nosotras decidimos cuáles son nuestros límites. Hacemos la prueba del semáforo, en el cual la coordinadora de intimidad marca en verde las zonas de nuestros cuerpos que no nos importa que se manipulen, las que no nos importa pero no queremos que se aprieten o se chupen en ámbar, y en rojo las que no toleramos en absoluto que se manipulen".
Entre las herramientas de una coordinadora de intimidad están los tangas transparentes que simulan la piel humana, las pezoneras, las "copas de hockey" que interponen una barrera entre los dedos y los labios de la vagina de una actriz. "En una escena de SMILEY una compañera de almacén tenía que masturbarme por debajo del pantalón pero no podía pasar sus dedos por debajo de mi ropa interior y además yo llevaba una copa de hockey durísima, por lo que solo noté cierta presión", recuerda Meritxell Calvo.
En una escena de NACHO, la serie ambientada en el mundillo pornográfico español, una actriz porno real y dos actores convencionales tenían que tirar del pelo y escupir a la profesional. La hardeur ya estaba acostumbrada a las escenas fuertes pero no los dos actores, por lo que el trabajo de la coordinadora fue charlar con ambos, dejar que expresasen sus preocupaciones, y que se rieran un poco de la situación.
Las coordinadores de intimidad permiten que las actrices se relajen ante estas escenas, y a las productoras, evitar las situaciones de abusos de poder o las demandas judiciales por abuso sexual.Todos tienen en mante el incidente de la película EL ÚLTIMO TANGO EN PARÍS, cuando Marlon Brando violó a María Schneider sin que el director o los técnicos lo detuvieran.
No hay comentarios:
Publicar un comentario