Somos polvo de estrella. Literalmente.

La astrofísica y la patología médica parecen no tener mucho en común. ¿Qué relación puede tener una supernova con la metástasis del cáncer?

Simon Worrall ha entrevistado a un matrimonio muy peculiar.. El marido es un astrofísico, Karel Schrijver, del Lockheed Martin Solar and Astrophisics Laboratory, y su esposa, Iris Schrijver, profesora de Patología en la Universidad de Stanford. Son los autores del libro VIVIR CON LAS ESTRELLAS: COMO EL CUERPO HUMANO CONECTA LOS CICLOS DE LA TIERRA, LOS PLANETAS, Y LAS ESTRELLAS.

"SOMOS POLVO DE ESTRELLA" cantaba Joni Mitchell en WOODSTOCK. ¿Estaís de acerdo?

Iris: Lo afirmamos furibundamente. Todo lo que existe en la Tierra se creó a partir del polvo de estrellas. Esto nos conecta con el universo.

Creemos que todo lo que hay en un cuerpo humano es permanente, desde el nacimiento hasta el momento de la muerte, pero todo lo que tenemos está hecho a partir de los componentes químicos y físicos de las estrellas y de la formación de las galaxias. Además,cada pocos meses nuestras células, excepto las neuronas, mueren, y son reemlazadas por otras que cumplen con las mismas funciones.

Iris; tú eres médico patólogo y tu esposo es astrofísico. Describe vuestras funciones.

Iris: Como bióloga molecular estudiolas razones por las que la gente sufre enfermedades autoimunes como el cáncer. Estudio el ADN de los enfermos, y con lo que descubro, les recomiendo a los oncólogos y los genetistas un tratamiento u otro.

Karel:Como astrofísico me interesan cosas como la misteriosa materia oscura o los procesos nuclerares dentro de las estrellas. Yo, personalmente, estudio el sol, que es la estrella que tenemos más a mano los científicos.

Tendemos a pensar que nuestros cuerpos dejan de cambiar- es decir, de crecer- cuando llegamos a la edad adulta. Pero las células siempre se están regenerando, ¿es cierto?

Iris: Mucha gente no piensa en su piel como un organo más. Cambiamos las células cutáneas cada año. Cada minuto mueren 30.000 células de todo tipo en nuestro cuerpo y son regeneradas al instante. 

Dices que reemplazamos más células a medida que crecemos, pero a diferentes ritmos.

Iris: Algunas de nuestras células no están diseñadas para sobrevivir mas que unos escasos días. He hablado de las células cutáneas pero también podemos hablar de las del tracto digestivo. Las células cardiacas pueden durar una década. Todos cumplimos los 50 años con la mitad de las células del corazón reemplazadas.

Una cosa que me sorprendió es que caen a la Tierra 40.000 toneladas de polvo cósmico cada año. ¿Cómo nos afecta esto?

Karel: Al principio solo había una nube de gas congelado y mucho polvo cósmico. Las partículas de polvo empezaron a chocar entre ellas y la gravedad hizo que se formasen los planetas. Los planetas son, en sus primeras etapas, aspiradoras que atraen todo el polvo cósmico. Pero queda siempre mucho por allí fuera, y ese es el que nos cae.

Un asteroide del tamaño de Texas acabó con los dinosaurios, pero por suerte, no nos caen cuerpos estelares de ese tamaño muy a menudo. Casi siempre se trata de motitas de tamaño microscópico.

Estos cuerpos contienen oxígeno y carbono, hierro, niquel, y otros elementos que contiene el cuerpo humano. Y ahí es donde entra la especialidad de Iris.

¿Son las malformaciones parte del orden cósmico?

Iris: Por desgracia. El cáncer y las malformaciones son un proceso de déficit en el modo en que se ordenan las células. El cáncer no es más que un desarreglo entre las células que mueren y dejan de funcionar correctamente y las que deben reemplazarlas

Decis que hay muchas cosas que utilizan los organismos humanos y que proceden del espacio exterior. Habladnos de la sal:

Karel: Quimicamente, hay dos tipos de sales. Cloduro y sodio. Se formaron gracias a la explosión de estrellas billones de años atrás y participaron en la formación de La Tierra. Las explosiones celulares siguen ocurriendo por toda la galaxia, por lo que la sal con la que cocinamos ha sido formada recientemente.