martes, 27 de junio de 2017

La leyenda del Holandés Errante.

A lo largo de la Historia, la inmensidad de los océanos ha desatado el temor y la imaginación de los seres humanos; la fantasía y la superstición alimentaron leyendas en las que se entrelazan pequeñas pinceladas de realidad.

Una de las leyendas sobre barcos- fantasmas más conocida es la del Holandés Errante, un velero del siglo XVII condenado a navegar para siempre.
En la novela EL BARCO FANTASMA - de 1839- su autor Frederick Marryat adjudica el protagonismo de la leyenda al capitán de la Compañía de las Indias Occidentales Van Der Decken, un  tipo que intenta doblar el Cabo de Buena Esperanza en medio de una tormenta que amenaza echar a pique a su barco antes de llegar a navegar por el Índico. Para salvar las vidas de su tripulación, hará un pacto con el diablo del que sólo lo podrá liberar su hijo a costa de su propia vida. Enfurecido Dios por los tratos con Satanás, prohíbe a la tripulación tocar tierra en ningún puerto.
Los expertos en historia de la navegación opinan que el origen de la leyenda está en las banderas de cuarentena, que se ponían en los barcos cuando había epidemia a bordo. El resultado es que se impedía bajar a las tripulaciones a tierra ni descargar las mercancías, por lo que muchas empresas comerciales fueron directamente a la quiebra.
Se cree que para crear a Van Der Decken Marryatt se inspiró en un personaje real, el capitán Bernard Fokke ( del siglo XVII). Este oficial naval era famoso en los círculos comerciales por sus habilidades que le permitían realizar velocísimas singladuras entre Holanda y Java. Sus colegas decían que había hecho un pacto con el demonio, idea que alimentó su misteriosa desaparición en alta mar. El índico estaba formado de aguas infestadas de piratas, sobre todo a la altura de Madagascar, por lo que no se descarta el asalto como motivo de la desaparición.

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