Lucía Fernandez: "Soy una trabajadora sexual, no una víctima".

Lucía Fernández es una muchacha gijonesa de 26 años, que es prostituta, stripper y actriz pornográfica. Todo junto. Ha sido invitada a hablar sobre los derechos de las trabajadoras sexualess desde donde los ve ella, en el Aula Magna de la Facultad de Oviedo. "Mi objetivo es que las personas se formen un criterio certero, porque a las prostitutas nos molesta que se hable de nosotras sin contar con nosotras", incidió esta profesional del sexo y estudiante de Derecho.

¿Cuál es el principal problema de las prostitutas?

Se llama estigma y viene fomentado por una sociedad arraigada en la teoría judeocristiana y del mundo romano de que las mujeres son un simple objeto necesario y bonito para reprodicirse y cuidar a la prole. 


 En mi opinión, la prostitución y el trabajo en la industria de los espectáculos para dultos es una opción perfectamente válida para las mujeres a las que no nos afecte un dilema moral.

Hace tiempo Lucía preguntó a sus compañeras qué beneficios reales tenía su profesión para ellas. "El trabajo sexual me produce empoderamiento", contestó una de ellas. "Para mí es ser una mujer autónoma, nunca una víctima", la contestó otra. Teniendo en cuenta que, en mi opinión de bloguero, muchas prostitutas benefician a las mujeres en detrimento suyo, al absorber muchas de las frustraciones y la violencia de género de los hombres, puede parecer incluso idealista. Uno se pregunta: ¿Quiénes son estas afortunadas?

Lucía; Tú no tienes derechos laborales, ¿no te parece?

No los tengo expresamente reconocidos en la legislación, pero sí hay muchas normas administrativas que respaldan la actividad de empresarios que tienen prostíbulos, como en el caso de Barcelona, que regula los espacios de concurrencia pública.

Pero esa permisividad puede beneficiar a los tratantes de blancas, ¿no crees?

!La leche!

¿He dicho algo que te incomode, Lucía?

La trata de blancas supone una explotación de mujeres que no quieren estar en la prostitución y que las normas legales protejas los derechos de las trabajadoras sexuales no les da vía libre a los proxenetas. También hay hosteleros y empresarios fabriles explotadores y nadie los persigue...

Yo, personalmente, condeno la explotación sexual. La sociedad debería dar cobertura jurídica a estas víctimas de verdad, y ofrecerles ayuda psicologica y alternativas laborales a las mujeres que finalmente son rescatadas de los proxenetas.

¿Es fácil hacer dinero con tu trabajo?

Es un dinero rápido, para nada fácil. Lo hago por una necesidad económica. En un mundo de precariedad laboral, quería un colchón económico para mi futuro.

He sido camarera, niñera, promotora... Cuando me trasladé hace dos años a Barcelona para estudiar descubrí que la capital condal era una ciudad muy cara. Me preocupaba saber si podría cuidar de mí misma con tan escasos medios. Compartía un piso con unas chicas. Una se sacaba un dinero extra haciendo servicios sexuales. Y pensé.. Si ella no está preocupada por qué no hacerlo yo misma.

Pero estás estudiando Derecho.

Me quedan cinco asignaturas. No quiero ser abogada. Prefiero opositar a la Inspección de Trabajo y Seguridad Social.

Pero dejaste de ir por la Facultad de Derecho para evitar que tu profesión te perjudicase, Lucía.

Partí de la premisa de que si voy a clase pueda tener problemas por el tema del estigma, si mis profesores se enteran. Además la mayoría de los alumnos todavía están en la fase adolescente y no saben aceptar estas cosas de un modo adulto. Una vez pusieron en la emisora de la Facultad una grabación mía con mis gemidos. Para matarlos.