viernes, 4 de enero de 2019

VATEL, de Roland Joffé.(2000)

Castillo de Chantilly, 1671. El envejecido príncipe de Condé quiere recuperar el favor del rey ya que está medio arruinado y desea dirigir la expedición francesa contra Holanda de 1672. Para ello le pide a su intendente Vatel ( Gerard Depardieu) que prepare una fiesta de tres días y tres noches para la Corte. Vatel tiene que dirigir a un ejército de criados, cocineros y hasta expertos en fuegos artificiales para deslumbrar al rey Luís XIV.

 Durante esa fiesta se enamorará de la sincera Madame de Montausier (Uma Thurman), dama de compañía de la reina.Esta muchacha esta siendo atosigada por el conde de Lauzun (Tim Roth), un pisaverde que usa malas artes para quitar de en medio a los que estorban sus caprichos, y por el mismísimo Rey.

Dice la leyenda que Vatel se ahorcó por no poder ofrecer pescado fresco al rey en el plazo previsto, pero a saber por qué sería realmente. En la película vemos a los arostócratas jugarse los criados, entre ellos Vatel, a las cartas. Condé perdió a Vatel en una mano frente al rey Luis XIV.

El contexto histórico; comer en la mesa del Rey Sol.

Luís XIV cenaba más de 20 platos cada noche: faisán, marisco, sopa y paté como entremeses; pasteles de pollo, pató, jabalí, venado, tortuga con arroz como plato fuerte; sardinas, ostras y salmón como platos habituales.

Luís XIV mandó construir en su pabellón de caza de Versalles un gran edificio cuadrado, en Grand Commun para alojar las cocinas. En 1712 trabajaban allí 320 personas. Los intendentes del Palacio de Versalles mezclaron harina con tocino derretido para inventar la salsa bechamel. Ana de Austria, esposa de Luís XIII y madre del Rey Sol introdujo en Francia el chocolate y la "olla podrida".

La olla a presión fue inventada por el físico francés Dennis Papin en 1679. "La presentó ante el rey como na máquina digestiva que extraía la gelatina de los huesos y cocinaba las carnes en menor tiempo. Desgraciadamente les añadía un poco apetecible regusto a amoniaco", me explica Francesca Sgurbati, autora de A LA MESA DEL LOS REYES ( Gatopardo Ediciones).

Hubo otras novedades. Dejó de cocinarse en las chimeneas con la invención del potager, un mueble precusor de las cocinas de leña. Las salsas comenzaron a servirse aparte; y la mantequilla se convirtió en imprescindible. Los nobles intentaban emular el lujo de Versalles y contrataban cocineros imaginativos. Tras la Revolución Francesa, estos chefs se vieron desempleados por lo que viajaron por el mundo exportando las maravillas de la cocina francesa. Uno de ellos, Bauvilliers, creó en 1765 el primer restaurante.

Hasta el siglo XVIII los platos eran de metal: de oro y plata los de los ricos. De peltre 8 aleación de cinz, cobre y estaño), los de los burgueses enroquecidos. Los pobres comian dorectamente de la olla. Existían los tenedores pero los criados solamente los usaban para servir la comida en los platos, ya que los cortesanos de Luís XIV comían con las manos. Los cuchillos eran redondeados para que no pudieran usarse como armas. Los vasos no se colocaban en la mesa. A los ricos les abastecían sus lacayos. Los pobres bebían directamente de las jarras de barro.

PARA VER.
https://www.youtube.com/watch?v=oVRoqRDjkVU 

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