martes, 11 de septiembre de 2018

Reina Cristina, de Mika Kaurismaki.

Este director finlandés hace un retrato documentado de la inmortal reina de Suecia - ya llevado a la gran pantalla por Rouben Maumilian con Greta Garbo de protagonista-. El ambiente de la corte sueca entre los años 1632 y 1654, durante el reinado de esta monanca tan avanzada a su época, están muy cuidados.

Cristina inició su reinado a los 6 años, en 1632, a la muerte de su padre. Poco después, fue separado de su madre y confiada a los cuidados de su regente, el regente Axel Oxentierna. Axel le instruye en la etiqueta cortesana rígida y en la fé luterana, pero abierta a las novedades literarias, culturales y artísticas.

La Cristina de Kaurismaki - la premiada actriz Malin Buska- se muestra con una personalidad fuerte, que no se somete a las reglas politicas establecidas en la Europa del siglo XVII. Mientras los países europeos se desangran en la Guerra de los Treinta Años, ella es decididamente pacifista. Negocia la Paz de Westfalia de 1648, favoreciendo a Siecia en el plano diplomático, aunque eso le cueste ceder en ciertos puntos importantes para los intereses del bando protestante.

En lo personal, tampoco se ajusta a lo que los cortesanos desean ver en una monarca. Le gusta la esgrima y los deportes, tanto como la lectura y el aprendizaje de idiomas. Prefiere llevar ropa masculina y no muestra el menor interés en dar a Suecia un heredero. Por el contraria muestra su hemosexualidad cayendo rendida a los pies de su prima y dama de compañía Ebba (interpretada por la bella actriz Sarah Gadon), a la que convierte en su amante oficial.

Tampoco sus intereses como mecenas la hacen cómoda para sus ministros. Recupera obras literarias y pictóricas proscritas por considerarse catolicas y protege a artistas e intelectuales de toda Europa, entre ellos el filósofo René Descartes.

Los intrigantes deciden ponerse a conspirar, así que Ebba es apartada de la Corte y obligada a contraer matrimonio, Descartes es envenenado y le reina se ve forzada por las ciscunstancias a buscar merido y dotar a Suecia de un heredero.

El epílogo muestra al espectador las últimas deciciones de Cristina de Suecia. En 1654 deja el trono en manos de su primo Carlos Gustavo.

Para ver:

https://www.youtube.com/watch?v=8wnUcB4HLiI 

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