Estamos en medio de la corriente posmoderna, que bebe de todas las corrientes amteriores. Es por eso que es difícil catalogas esta excesiva película. ¿Es una película erótica, a juzgar por los desnudos y las referencias a una presumible depravación y decadencia? No. ¿Se trata de un drama? Podría ser, salvo que el personaje es real y lo que se está dramatizando es su vida privada. ¿Es una comedia? No, porque aunque lo que presenciamos es una caricatura, no se espera que riamos.
La parte erótica de la película está relacionada con Sergio Morra, un empresario joven del sur de Italia. Está acostumbrado a ofrecer prostitutas a otros empresarios y funcionarios para conseguir los contratos. Tras una de esas transacciones, mientras se beneficia a la chica de turno, se le ocurre que puede prosperar ofreciéndoles fiestas y chicas a Silvio Berlusconi, el presidente de Força Italia, ahora apartado del poder por sus trapicheos y sus relaciones con la Ndranguetha, una organización mafiosa.
La parte dramática está centrada en los esfuerzos de Verónica Lario, la esposa de Berlusconi,por conservar su matrimonio. Es una tarea imposible porque Berlusconi ni se esfuerza por llegar hasta ella ni se esfuerza por ponerse en los zapatos de nadie. Al final Verónica le pedirá el divorcio.
La parte cómica la hace un Berlusconi que más que en un cargo público parece que está en el escenario de un circo, con sus juguetes, con sus aires de playboy trasnochado. Es un poco triste cuando personas más jóvenes como un jugador de fútbol o una bellina no comparten su visión del mundo ni sus sueños de grandeza.
Sorentino pudo hacer más daño a Berlusconi de haber querido. Lo presenta como un héroe en los terremotos de L´Aquila, cuando en realidad allí protagonizó en 2009 una de sus más viscerales patochadas de histrión. Concretamente le preguntó a una enfermera voluntaria de la región si podía toquetearla.
También se muestra una imagen descafeinada de lo que debieron ser las fiestas bunga- bunga. Se ven desnudos y muchachas besándose sensualmente en los labios, pero no a empresarios con los pantalones bajados. (Spoiler) Berlusconi acepta el regalo de Morra pero no le convierte en eurodiputado, a pesar de que Berlusconi convirtió en una especia de club social el Parlamento italiano, y nombró senadoras a chicas sin más preparación que la de ser guapas.
https://www.youtube.com/watch?v=sMuE8EcRZpw
https://www.youtube.com/watch?v=sMuE8EcRZpw
No hay comentarios:
Publicar un comentario