Los sefarditas.

Nunca han dejado de sentirse españoles. Sus familias han vivido en Marruecos, en Argentina, en Turquía y soñaban con regresar a Sefarad, su tierra.

Durme, durme,

mi alma donzella

durme, durme,

sin ansia y dolor.

Una muchacha nacida en Turquía le canta a su nieta esta nana medieval en Uruguay, y le habla con nolstalgía de Sefarad ( en hebreo, España), una tierra en la que jmás ha estado.

"Mi abuela me cantaba nanas en ladino o judeo español, una forma de castellano medieval que sigue viva entre los judíos sefarditas, los que los Reyes Católicos expulsaron de España en 1492", me explica Alejandra Abulafia mientras paseamos por Toledo. Alejandra es uruguaya y judía, pero también se siente española..

"Mi padre siempre me decía que somos descendientes del gran cabalista del siglo XII Abraham Abulafia. Nos habló tanto de él que era como si estuviera vivo", explica Alejandra.

Abraham Abulafua ha pasado a la historia del misticismo judío porque llegó a la conclusión de que el Mesías nacería en Zaragoza en 1240...Siguió indagando en la Cabala y, durante unos de sus extasis, escuchó unas voces que le ordenaban anunciar la buena nueva al Papa Nicolás III y convertirlo al judaísmo.

Para este fin, Abulafia viajó a Roma. El Papa Nicolás III ordenó quemar en la hoguera a ese peligroso hereje en cuanto hiciese acto de aparición en su residencia de verano de Livorno. Pero el Santo Padre murió la noche anterior a la llegada de Abraham Abulafia a Roma, lo que el místico judío creyó que era una señal. Los cardenales le dejaron marchar tras amedrentarle un poco porque tenían que escoger un nuevo Papa en el Cónclave. Los rabinos de la Corona de Aragón apartaron de sus círculos a ese peligroso iluminado que podía costarles una persecución o un endurecimiento de sus condiciones de vida por parte de las autoridades cristianas. A Abraham Abulafia se le pierde la pista en 1292.

Para los judíos la destrucción del Templo en 80 de nuestra era por el emperador Tito, el Holocausto  la expulsión de Sefarad son las grandes heridas que supuran todavía. El Gobierno español ha intentado reparar el daño invitando a venir a los sefarditas en 1924 y en 1948. En 2014 el Gobierno de España hizo una tercera invitación a regresar a las familias sefarditas con la oferta de la doble nacionalidad. ¿De cuántas personas estamos hablando? Los expertos en Historia de las Religiones hablan de 3,5 millones de personas. (El resto, unos 10,5 millones de judíos son askenazíes o hasidim, procedentes de Europa Central y del Este, de donde huyeron del Holocausto nazi y las leyes discriminatorias rusas. No tienen derecho a beneficiarse de la generosa oferta).

Sebastián de la Obra dirige la Casa de Sefarad en Toledo y me explica: "La oferta del Gobierno español no se recibe igual en un barrio obrero de Nueva York, donde se ve el pasado medieval de forma romántica e idealizada, que en Venezuela, donde se ve como la única oportunidad de escapar de una dictadura de iluminados políticos".

Hay presencia de judíos casi desde los comienzos de la diáspora, con la destrucción y el saqueo del Templo de Jerusalém, en 80 después de Cristo. Hay restos de enterramientos hebreos en las necrópolis de Tarragona, Mérida y Almería. "Nuestros judíos son como los indios americanos. ¿Quiénes son los americanos primigenios? Los indios. ¿Quiénes fueron los primeros que trataron de crear una cultura alejada de la romana por primera vez dentro de Hispania? Los judíos sefarditas.", explica De la Obra.

"En 1492 no acaba la presencia judía en España. Unos se van pero otros se quedan. Algunos sefarditas como la familia de Teresa de Jesús se convierten el cristinismo, mientras otros judaizan y aprenden a temer a la Inquisición. Los conversos son despreciados por los cristianos, que no se creen su conversión y apartados de los puestos de influencia, y reprobados por los rabinos, por herejes apóstatas",