jueves, 13 de agosto de 2020

El asesinato de Jesse James por el cobarde Robert Ford.(2007) Esto no es un western.

 

Cuenta la leyenda que cuando el actor de películas de cine del Oeste de la época muda visitó Tombstone para interpretar una de las primeras películas sobre el duelo del O.K. Corral lo hizo en compañía del mismísimo sheriff Wiatt Earp. Mix estaba entusiasmado y le describió su idea de cómo fue el célebre tiroteo de 1881. Earp dejó a hablar al actor y comentó: "Sí; tienes razón. Así fue, mentira más o menos".

EL ASESINATO DE JESSE JAMES POR EL COBARDE ROBERT FORD no ofrece tiroteos. Solo hay un asalto a un ferrocarril, donde Jesse James mató a un maquinista por considerarle relacionado con la muerte de un familiar. No es un western, porque apenas hay acción. Si está presente el wilderness, la naturaleza de los Estados Unidos, pero es una naturaleza apacible.

Robert Ford es un adolescente que crece con la leyenda de Jesse James, con el sueño de ser de su banda. Cuando consigue ser admitido, no encuentra al Robin Hood del Oeste del que hablan los periódicos. Solo encuentra a un asaltante de trenes y bancos paranoíco, que mata a sus propios hombres por respirar un poco más y sentirse a gusto con sus propios fantasmas.

La época en que un hombre con una pistola podía decidir las cosas va siendo dejada atrás por una sociedad cada vez más estructurada y con más recursos. Robert Ford y su hermano Charlie comprenden que su sueño está podrido, aunque todavía lo deseen, y que la única manera de convertirse en Jesse James es compartir su podredumbre y darle muerte. Pero, ¿cómo das muerte a una leyenda? A traición y por la espalda. De otro modo no se puede.

EL ASESINATO DE JESSE JAMES POR EL COBARDE ROBERT FORD cuenta como los héroes violentos tienen una capa pesada y envenenada en torno a sus hombros. Una capa que al final se alimenta de ellos y de los que lo rodean. Jesse James era un héroe para los estadounidenses en la difícil época de la Reconstrucción. Atracaba bancos y trenes, las instituciones que los estados esclavistas no querían en manos de los vencedores. Pero una vez que los asumieron como propios y recuperaron el status supremacista blanco inicial, ya no hubo lugar para la banda real de James, solo para una leyenda artificial creada por los periódicos y las novelas baratas.

¿Fue bueno en nuestros días Pablo Escobar?¿Lo es el Chapo Guzmán?¿Lo era en los años 1920 Al Capone? Eran hombres al límite, hombres que se presentaban como la solución en un mundo desigual, y la gente los amaba por ello. En eso radicaba su fuerza. Que esos hombres tuvieran que ser destruidos para que su brillo - y las consecuencias de sus actividades- no achicharrase el mundo que los veneraba, ya es harina de otro costal. 

PARA VER:

https://www.youtube.com/watch?v=EUC_PQGVsx4


No hay comentarios:

Publicar un comentario

BUFFALO KIDS: huerfanos en el Oeste

Tom y Mary viajan a América en 1886 para reunirse con su tío y emprender una nueva vida allí.Pero al no encontrarlo en el puerto tienen que ...