Madrugada del 14 de abril de 1912. Charles mira le horizonte. Todo está tranquilo. Los icebergs primaverales siguen su ruta derivando hacia el sur mansamente. El único problema es que el paquebote desde el que los observa se está hundiendo. Y que uno de esos icebergs es el culpable de que esto ocurra.
Amontonados en la proa las personas que no han podido embarcar en un bote rezan y se abrazan. Cuando la popa se hunde un poco más, la gente empieza a caer como un tobogán golpeándose contra las chimeneas y a tirarse al agua. Charles espera hasta el final, saca una petaca de la chaqueta y bebe un trago. Después se tira al agua, mientras todavía pueda hacerlo. Será el alcohol de la petaca o que le mantendrá caliente en las gélidas aguas a 2º C y mantener la calma frente al pánico.
"El Titanic no acabó en el fondo del mar por e acero quebradizo con el que fue construído sino por las negligencias del capitán con la navegación por aguas peligrosas. Edward Smith hizo caso omiso a los avisos acerca de la presencia de icebergs. El Titanic llevaba una velocidad excesiva. Los vigías no estaban equipados con prismáticos. La maniobra fue precipitada y brusca. Los oficiales de radiotelégrafo mandaron señales de socorro confusas", dice James Cameron, director de la película Titanic. Pero eso a Charles le importa un rábano. Lo que quiere es aferrarse a la vida un rato más.
Charles era el panadero jefe de la White Star Line a sus 34 años. Estaba casado y tenía dos hijos. Recibía un sueldo de 13 libras y tenía a su cargo a trece personas.
Ese domingo Charles libraba. Cuando el Titanic sufrió el impacto estaba en su camarote durmiendo. Subió a la cubierta de proa y vio a personas de primera clase jugando con el hielo del iceberg. Como hombre prevenido vale por dos, reunió a sus empleados y les puso a equipar los botes con comida y botellas de agua.
Los botes podían cargar con 1178 pasajeros pero el pasaje es de 2223 personas. Ningún pasajero losa be y pocos miembros de la tripulación piensan seriamente en ello. Charles tenía que dirigir el Bote Nº 10 pero se queda en cubierta ayudando a embarcar a las pasajeras. Muchos pasajeros suben a cubierta con el pijama o el camisón bajo los abrigos. Algunos llevan sus maletas consigo.
Cuando las mujeres se niegan a subir a bordo de los botes para no dejar atrás a sus maridos queda la alternativa de empujarlas por las malas a bordo. No hay tiempo para discutir con ellas.
Cuando el barco se hubo hundido solo se recogieron 13 personas del Atlántico y se las subió a los botes, que viajaban con espacios vacíos. Charles se encarama con otras 25 personas en un bote volcado hasta que uno con 70 personas se acerca y dice que hay espacio para 10 más. Charles nada hasta el nuevo bote.
Horas más tarde, en el Bote nº 6 la señora Norton escucha como un relámpago. Son las señales acústicas del Carpathia. En el Bote nº 3 alguien hace arder un periódico para responder a las señales acústicas y marcar la posición de los botes. Sobrevivieron 711 personas de 3083 personas.
Charles regresó a Inglaterra. En 1920 se mudó a Nueva Jersey. Se embarcaría en varios barcos como oficial panadero. Al poco su esposa falleció. En 1925 se casa por segunda vez hasta que su segunda esposa muere en 1944.
El 9 de diciembre de 1956 Charles morirá a los 78 años de una neumonía. Le acompañaban su hija Agnes y su hijastra Rose. Su hijo Roland había muerto antes. Y ni dejó de beber ocasionalmente whiskey de su vieja pètaca del Titanic.
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