"Haz siempre lo máximo y mejor que puedas. Siendo así, pase lo que pase, aceptaremos las consecuencias con agrado. Y vivirás con mayor intensidad(...) Si siempre haces lo mejor que puedas, nunca podrás recriminarte nada ni arrepentirte de nada.
MIGUEL RUIZ.
Uno de los cuatro Acuerdos Toltecas indica que u hombre o mujer debe dar su mejor esfuerzo en todas las situaciones sin importar el resultado final y sin importar las adversidades.
No se trata de ser perfeccionista, sino de comprometerte contigo mismo y hacer el máximo esfuerzo por ti, por tu felicidad y por tu plenitud. No porque sea lo más correcto ir hasta el límite de tus posibilidades, sino porque estás convencido de que es lo que quieres para ti. Así eliminas los remordimientos y los sentimientos de "culpa" porque diste lo mejor de ti.
Tenemos que tener en cuenta que nuestro rendimiento no siempre será el mismo. No puedes aportar lo mismo cuando estás recién levantado y despejado que cuando llevas ya ocho horas danzando, no lo mismo cuando están enfermo que cuando estás sano. Pero siempre debes intentar hacer lo mejor que puedas dentro de las circunstancias. Aquí el único pecado es dejar de intentar mejorar.
CUENTO ZEN:
Había una vez un hombre que quería alcanzar la iluminación, así que viajó a un santuario budista en una remota montaña. Allí le preguntó al abad:"Maestro;¿Cuánto tiempo tardaré en alcanzar la iluminación?"
El shifu le contestó: "Si meditas cuatro horas al día alcanzarás la iluminación dentro de diez años".
-Entonces meditaré ocho horas al día.
-En ese aso, tardarás veinte años en alcanzar la iluminación.
-¿Por qué tardaría más?
-No estás en mi templo para sacrificar tu alegría ni tu vida. Estás aquí para vivir, para ser feliz y para amar. Si puedes alcanzar tu máximo nivel en dos horas de meditación pero utilizas ocho solo conseguirás agotarte, apartarte del verdadero significado de la meditación y no disfrutar de la vida. Haz lo máximo que puedas y tal vez aprenderás que independientemente del tiempo que medites puedes vivir, amar y ser feliz.
Si intentas hacer más te agotarás, tu salud decaerá y el objetivo tardará más en ser alcanzado. Pero si hacemos menos esto nos va a generar frustración, sentimiento de culpa...y nos coloca en el papel de víctimas.
La mayos parte de las personas solo actuamos cuando sabemos que va a haber una recompensa y no disfrutamos de ella. Y ese es el motivo de que no hagamos el máximo de lo que podemos. Hay personas que van a trabajar pensando en el día de cobro y en el dinero que ganarán; es decir, que trabajamos por la recompensa, poder pagar facturas, no porque nos guste nuestro trabajo. Esto nos convierte en personas frustradas, incapaces de ser felices.
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