viernes, 31 de enero de 2025

El quiosco del parque de Pozokoetxe.

Escena: Un quiosco en el parque, con un ambiente animado. Mari Carmen y Luisa están de pie, cada una con un brazo cruzado, mirándose desafiantes. Pili, nerviosa, intenta intervenir.

Mari Carmen: (con tono dramático) ¡Luisa, no puedo creer que hayas decidido ocupar todo el espacio del armario! ¡Es como si tuvieras un armario de tres pisos en un apartamento de un solo dormitorio!

Luisa: (con una sonrisa burlona) Oh, por favor, Mari Carmen. Si no fuera por mí, el armario sería un desierto. ¡Tus suéteres ocupan más espacio que un elefante en una tienda de porcelana!

Pili: (interviniendo, con voz temblorosa) Chicas, ¿no podemos simplemente compartir el armario? Tal vez podríamos hacer un... un sistema de rotación o algo así.

Mari Carmen: (sin escuchar a Pili) ¡Rotación! ¡Eso suena como un plan de astronautas! ¡No tengo tiempo para eso! ¡Necesito mis cosas a la vista!

Luisa: (riendo) ¿A la vista? ¿O a la vista de tus amigos? Porque cada vez que vienen, parece que el armario se convierte en un espectáculo de moda.

Pili: (frustrada) ¡Por favor! ¡No quiero que esto se convierta en una pelea! ¡Estamos en un quiosco, por el amor de Dios!

Maria Jesús: (con calma, mientras cobra entradas a los amigos) ¡Chicas, chicas! Recuerden que el armario no es el único lugar donde pueden guardar cosas. ¡Siempre pueden usar el baúl de la abuela!

Jose Felix: (riéndose) ¡Eso suena como una solución de emergencia! ¿Quién necesita un armario cuando tienes un baúl lleno de recuerdos?

Pedro: (bromeando) Oye, tal vez deberíamos hacer un reality show: "Las hermanas y el armario". ¡Sería un éxito!

Ángeles: (aplaudiendo) ¡Sí! ¡Y yo quiero ser la presentadora!

Nines: (con una sonrisa) ¡Yo me encargaré de la producción! ¡Esto va a ser épico!

Pili: (suspirando, mientras se pasa la mano por el cabello) ¡Esto se está saliendo de control! ¡Solo quiero un armario en paz!

Maria Jesús: (con una sonrisa tranquila) Bueno, mientras tanto, ¿quién quiere un helado? ¡Eso siempre ayuda a calmar los ánimos!

Mari Carmen y Luisa: (mirándose y sonriendo) ¡Helado! ¡Eso suena bien!

Pili: (aliviada) ¡Por fin algo en lo que estamos de acuerdo!

(Las tres hermanas se ríen y se dirigen al quiosco de helados, dejando atrás la discusión del armario.)
  


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