viernes, 4 de noviembre de 2016

La columna trajana.

Trajano invadió la Dacia en 101 d C, donde mantuvo una campaña militar hasta el 106. El emperador hispano reclutó varias legiones, cruzó el Danubio por el puente provisional más largo jamás construido por ingenieros militares romanos, y borró a los dacios de las páginas de la Historia.
De Dacia las legiones volvieron con un botín de 250.000 kilos de oro y medio millón de kilos de plata, además de sumar alimperio una fértil provincia nueva. Pra commemorar la victoria, el emperador mandó construir un foro que incluia una amlia plaza porticada, dos bibliotecas, y un enorme edificio público conocido como la Basílica Ulpia. Por encima de todo se erguía una columna de piedra de 38 metros de altura, coronada por una estatua de bronce del conquistador. Tallada en ella se ven 155 escenas donde los legionarios romanos marchan y construyen empalizadas, los dacios negocian ¿ o se rinden?, no está claro, suplican y perecen. El emperador hace sacrificios a los dioses.
Si eres rumano y te acercas a Roma la columna es el único recuerdo que nos queda de la gente gobernada desde Sergezegetusa por el rey Decébalo. Sabemos que eran hábiles mineros y órfebres, que trabajaban el oro, y poco más. No tenían escritura.
El arqueólogo e historiador del arte Filippo Coarelli dice que la columna era una especie de crónica de guerra con un alto valor propagandístico para la plebe romana. Trajano daba de sí mismo y de su cultura la imagen que deseaba. Aparece 58 veces arengando a sus tropas, colsultando a los tribunos subalternos y haciendo sacrificios a los dioses.
Sin duda algún historiador romano escribió una crónica de la Guerra Dacia que se guardaba en una de las bibliotecas de ese nuevo foro, pero no nos ha llegado.
John Coulston, un experto en iconografía, dice que las escenas fueron encargadas  a escultores de relieves que nunca habian estado cerca de los soldados durante una campaña, por lo que esculpieron lo que les contaron los veteranos. Y los veteranos y Trajano, por supuesto, no querían empañar la gloria de Roma con escenas de violaciones, la realidad de que en aquella guerra los legionarios también murieron, o los combates. Roma civilizaba al mundo, no exterminaba pueblos y culturas.
Entre los frisos que representan al ejército romano se pueden ver jinetes africanos con rastas, arqueros asiáticos y germanos que luchan sin loriga. Todo esto transmite la idea de que cualquiera podía aspirar a la ciudadanía romana. Trajano era hispano y había llegado a emperador.
El emperador Trajano había comenzado la campaña dacia a causas de las extorsiones del rey Decébalo: cobraban tributos al Imperio en concepto de impuesto de protección al tiempo que sus guerreros saqueaban las ciudades fronterizas. En 101 Trajano da orden de castigar a ese pueblo. Tras dos años de guerra, Decébalo nagoció un tratado que rompió en cuanto pudo.
Durante la segunda campaña dacia Trajano arrasó Seregezemitusa la capital. Decébalo se envenenó para no ser capturado vivo. En los relieves se ven muchos dacios alargando las manos para coger copas. ¿Tienes sed?¿O quieren seguir a su rey al Más Allá?
También hay una escena confusa de unas mujeres que torturan con antorchas a unos prisioneros descamisados. ¿Son mujeres dacias vengando a sus maridos muertos en combate? ¿O son las mujeres públicas que acompañan a las legiones vengándose de los guerreros que matan a sus clientes? No lo sabemos.
Hay una escena de un legionario que avanza con una cabeza decapitada entre los dientes. Una concesión a la realidad de alguien que sí sabía cómo se comportaban los hombres durante las campañas militares.

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