Sigo recuperando entradas que borré en su día. Esta me hizo gracia aunque el asunto no tiene la más mínima. Gethin Probert - creo que se llamaba así- pactó con un amigo que si su equipo ganaba un partido de rugby - creo- se cortaba los testículos. El equipo ganó y como Probert era un hombre de palabra se castró con unas tijeras de costura en la bañera de su casa. Metió las partes inmoladas en una bolsa de plástico con la intención de demostrarle a su amigo que él era tan "macho" que renunciaba a su masculinidad por un partido de rugby.
Solo que no llegó porque se desmayó por la pérdida de sangre por el camino. Probert pasó algún tiempo en el hospital y después fue internado en una institución psiquiátrica. Por fin un hombre de palabra, no como los políticos que tenemos. Dijo que se automutilaba y lo hizo. En fin. Sic transit gloria mundi....

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