viernes, 5 de abril de 2019

Destroyer. Una mujer herida, de Karyn Kusama.

Nota mía.

La película muestra el hecho de que el crimen sí se paga, a menos que seas estúpido o un fanático. Eryn Bell ( Nicole Kidman) tiene que relacionarse en una misión como infiltrada con mujeres que antes se comportan como hembras que como mujeres, porque en ello cifran su valor y su supervivencia. Tiene que tratar con gente que cree que el dinero fácil es lo menos que merecen en un mundo que a Eryn le ha privado de cosas vitales para su desarrollo moral.

De joven yo leía panfletos políticos de izquierda, algunos de la izquierda radical nacionalista vasca. Se me ocurrió pensar, en un extraño arranque de lucidez de los escasos que tenía por entonces, que yo, en un ambiente propicio para ello, podía considerar lo más normal del mundo quemar cajeros o poner bombas. Que estar en un sitio u otro de la barrera podía no ser del todo optativo. Por suerte mi familia no es el ambiente propicio para que florezcan esas veleidades con las leyes penales, por lo que la cosa no fue más allá de una fascinación malsana por el mundo del activismo político, del que, por otra parte, no tenía mucha idea.

Eryn tiene que infiltrarse en una banda de atracadores y siente la llamada del dinero prohíbido, cree que no pasará nada por dejarse caer una sola vez. Luego tiene que alejar de los márgenes de ese precipicio a su hija Shelby, una adolescente de 16 años, que la desprecia, sin saberlo, por haberse dejado tentar y vivir en medio de las consecuencias. A pesar de que Shelby juega con lamisma tentacion a manos de su relación sentimental con un pandillero.

Eryn tiene que acabar con Sylas, el jefe de la banda, y lo hace a través de personas que siguen blanqueando dinero y delinquiendo tres lustros después, a pesar de que las consecuencias de haberse dejado tentar por el dinero fácil y la ley del más fuerte les estén pasando factura, Un atracador excarcelado a causa de una enfermedad crónica, otro de origen hispano que se oculta en los pliegues de la religión católica de quién era, y un abogado corrupto que quiere salvar a su hijo adolescente de lo que tiene que hacer para lograrlo. Solo Petra y Sylas no parecen tener conciencia ni necesidad de reparar nada.

Para ver:

https://www.youtube.com/watch?v=oRLs4ZyHJYQ 

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