Franz es un muchacho austriaco de 17 años, procedente de la localidad de Attersee, que ha crecido sin un referente paterno. Su madre lo envía a trabajar para Otto, un estanquero y vendedor de periódicos comunista, que le enseña a discernir qué es lo que desean realmente sus clientes, trabajadores arios y burgueses judíos. Las mujeres desean fumar cigarrillos caros, los hombre desean postales pornográficas y el doctor Sigmund Freud ( el último papel del fallecido Bruno Ganz) desea habanos.
Estamos en 1937. Entre el padre del psicoanálisis y Franz se establece una relación de maestro- aprendiz, sobre todo cuando el muchacho se enamora de la misteriosa Anezka, la bailarina de un cabaret.
Los nazis empiezan a desfilar por las calles de Viena y los vieneses empiezan a ver en sus despliegues militares la oportunidad de volver a la gloria perdida antes de la derrota en la Primera Guerra Mundial. El estanco de Otto sufre un ataque de los camisas pardas solo porque Otto se muestra reacia a vender ciertos periódicos.
Franz tendrá que librar a Anezka de sus proxenetas, y luchar al lado de Otto, convertirse a marchas forzadas en un hombre, explotar en un acto de virilidad, ¿Pero cómo hacerlo y asumir las consecuencias cuando lo que tienes ante tí es el poder de las porras de unos machos alfas tan acentuados como lo eran los camisas pardas?
El hecho de querer expresar la virilidad y no saber cómo se llega a eso ya aparrecía en la película TRENES RIGUROSAMENTE VIGILADOS (1966) ambientada en la ocupación de Checoslovaquia. Un joven empleado de ferrocarriles, Milos Mrha, ha intentado siuicidarse tras no poder cumplir como un hombre con su novia. Está metido en actividades de la Resistencia. El orgasmo que fue incapaz de tener con su chica es sustituído por la explosión de un vagón de municiones alemán y el apuñalamiento de un guardia herido.
Para ver:
https://www.youtube.com/watch?v=eoH-w0rysc0
Para ver:
https://www.youtube.com/watch?v=eoH-w0rysc0
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