martes, 11 de junio de 2019

La campaña egipcia de Napoleón.

A comienzos de 1801 lord George Keith, comandante de la escuadra británica en el Medterráneo mando su Armada hacia Egipto. Podía trasladar al milenario país, ahora una provincia otomana, un ejército de 18.000 hombres, y poner fin al dominio francés de ese territorio de una vez por todas. Los casacas rojas del general Abercrombie desembarcaron y defendieron una cabeza de puente de los soldados del general Menou el 8 de marzo. Hubo un segundo ataque el 21 de mayo en el que falleció Abercrombie.

Los franceses comandados por Napoleón Bonaparte estaban en Egipto desde 1798. Bonaparte esperaba repetir las hazañas asiáticas de Alejandro Magno y cortar las comunicaciones de los británicos con sus guarniciones enn La India.

Napoleón había desembarcado en junio de 1798 en Alejandría y librado una batalla contra los corruptos beyes mamelucos, que tenían explotada a la población egipcia, en la llanura de Gizeh. Es la conocida como Batalla de las Pirámides ("Desde lo alto de estas pirámides 40 siglos os contemplan", creo que les dijo a sus soldados"). Victoria francesa pero ninguna ventaja política ya que los oficiales de Intendecia napoleónicos resultaron ser tan despreciativos con los civiles egipcios y tan rapaces como los beyes mamelucos.

Una batalla de la escuadra de Nelson en Abukir contra la flota francesa amarrada a tierra, con la artillería casi desmontada y las guarniciones incompletas le cortó la retirada y los suministros a Napoleón.

Napoleón no se preocupa. Hacia 1799 los franceses avanzan hacia la India a pesar de que la flota inglesa está aprovisionando de armas y víveres a las guarniciones turcas y del fracaso del asedio francés de San Juan de Acre. Cuando estalla una epidemia de peste etre sus tropas, Napoleón decide replegarse a Egipto a mediados de 1799. Deja a su ejército abandonado a su suerte cuando los vientos políticos le susurran que es el momento de que el Directorío caiga como una fruta madura ante el espadón militar que se atreva a dar un golpe de Estado. La conjura de Brumario está a la vuelta de la esquina.

Tras la muerte del primer gobernador francés, le sustituye el general Menou, que se ha casado con una aristócrata copta. Este desea establecer una dinastía europea en Egipto tutelada por la metrópolis francesa. Los británicos ven tan realizable este proyecto que desean boicotearlo con la invasión de la rada de Abukir descrita. En realidad huno tres batallas en aquella rada del delta del Nilo. La primera es la batalla naval conocida como del Nilo, un fracaso del almirante Brueys y de Villeneuve, con la explosión de la santabarbara del buque insignia francés L´Orient de forma espectacular. La segunda es una batalla terrestre entre tropas francesas contra un ejército turco armado y comandado por oficiales británicos. Y la tercera y definitiva es la que nos ocupaba al principio: el enfrentamiento entre Menou y Abercrombie.

Tras la derrota francesa Menou se retira a Alejandría y resiste un asedio. Cuando Menou descubre que no habrá tropas de refresco ni nuevas armas para sus hombres se rinde a mediados de 1801. Napoleón está enfrascado en el tablero político europeo y ya se ha olvidado de su aventura oriental.

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